Acuerdo PY-EE.UU.


Félix Gerardo Ibarra Prieto

“La grandeza de la izquierda es querer salvar a los mediocres. Su debilidad es que hay demasiados” San Antonio.

Félix Gerardo Ibarra Prieto

Hemos leído desde algunas semanas la eminente relación de acercamiento entre la República del Paraguay y los EE.UU. Algunos de los diarios más importantes de la región, como el Clarín de Buenos Aires e importantes personalidades de la política regional como el canciller brasileño Celso Amorín y otros comenzaron a preocuparse sobre este hecho.

A mi modesto entender, como especialista en relaciones internacionales, esto es muy importante para nuestro país. El Paraguay tiene todo el derecho y la “soberanía” de buscar contactos bilaterales que lo lleven a vender sus productos a un mercado que todos quieren como lo son los EE.UU. ¿acaso el Brasil no ha hecho innúmeros acuerdos de este tipo como por ejemplo con China? y lo hizo con bombos y platillos bajo la mirada y la protesta de la Argentina.

Hoy reclaman, ayer lo hacían. El Brasil y la Argentina saben muy bien y mejor que nadie que, en el mundo de la política internacional todos los países, sin excepción, defienden sus intereses. Debemos entender que cuando nuestros vecinos se quejan, nada más están haciendo lo mismo.

El canciller brasileño dice que el Paraguay tiene obligaciones suscritas en el marco del MERCOSUR. Es cierto. Ellos también lo tienen. Todos tienen, pero a nadie le interesa los primos pobres a no ser algunas migajas con la finalidad de defender algún lugar como miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU por parte del Brasil, ahora ya enterrado.

No nos olvidemos que el candidato opositor brasileño José Serra (PSDB) hoy alcalde de S. Paulo y ahora candidato a gobernador por el mismo estado es literalmente contra el bloque regional. O sea, si hubiese ganado la elección hoy ya estaríamos sin el MERCOSUR.

Entonces Paraguay tiene sí toda la potestad y la soberanía de hacer aquello que mejor beneficio le traiga a su pueblo, y los dirigentes sociales y organizaciones de izquierda de nuestro país tienen que comenzar a entender que desde la caída Del Muro de Berlín hasta el año 2000 fueron la etapa de transición para el completo entierro del socialismo. Ahí están los dirigentes petistas (PT) brasileños cavándose sus propias tumbas porque no entendieron que los tiempos son otros.

Como dice el dirigente de un sector industrial de nuestro país “comercio por seguridad” a ellos le interesan eso y a nosotros los dos. Entonces vamos a aprovechar que por lo menos nos ofrecen algo. ¿Acaso si quisiesen hacer lo mismo a cambio de nada no lo harían? Claro que sí.

En realidad hay que hacer una lectura de todo esto. Ellos se acercaron al Paraguay no por su belleza pantanera ni por la dulzura de su idioma guaraní y sí porque el Paraguay actualmente ofrece una cierta estabilidad política, es un país pequeño, no tiene una súper población.

Ellos saben que nuestros problemas no son grandes ni muy graves. Nuestra deuda no es pesada. O sea, ellos ven lo que nuestros políticos, dirigentes y empresarios no ven. El país es fácil de llevarlo adelante. En consecuencia “los gringos” para hacerle frente al presidente venezolano - y aquí está la verdadera política de los yanquis-.

Va a hacer del Paraguay un país modelo de la región y de esa manera colocarle un freno a la expansión del cachorro de Fidel Castro, el presidente Hugo Chávez. No se olviden que estamos prestigiados. Antiguamente visitaban al Paraguay algunos generales del Comando Sur o especialistas en América Latina. Esta vez vino el propio secretario de defensa, Donald Ramsfeld.

Conclusión: Defensa, terrorismo, narcotráfico, capacitación militar. Todo esto es importante para ellos y para el Paraguay, pero lo que los americanos realmente quieren es mantener la hegemonía política en la región. Todo lo que se quiere en el mundo diplomático es que los EE.UU. te den importancia. Aprovechemos.

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