HOMBRES Y NOMBRES DE LA ANR: HC Y SANTIAGO PEÑA.

FÉLIX GERARDO IBARRA PRIETO

IMPORTADOS POR LA ANR

Ya es casi seguro que el candidato del oficialismo colorado para las internas sea el actual ministro de hacienda y ex liberal Santiago Peña. En dos semanas, tiempo dado por el presidente, Peña consiguió “conquistarle” a la base partidaria (parece ser una ramera fácil). 

Unos que otros rechazaron su candidatura, pero por una razón solo de colores, su pasado liberal (el político es como la mujer, muchas veces su pasado es más importante que su futuro). La mayoría se quedó callada. Les guste o no “el patrón” siempre tiene la razón. Al final, el partido en su preámbulo da a la persona humana el valor supremo y defiende su libertad y la felicidad colectiva. Puede ser que Santiago Peña no sea la felicidad colectiva de los colorados, no obstante hay que ver su desempeño a nivel nacional. (No me importa la interna colorada, me interesa su plan nacional si es que tiene)

En realidad la ANR no tiene hombres ni mucho menos nombres decentes para ser candidato a presidente de la república actualmente (HC fue un invento desesperado). Prueba de eso es que hoy nuevamente tiene que prestar un nombre del liberalismo para intentar correr por él en las elecciones (el cúmulo de la imposición y de la humillación al partido) Si hubiese otras posibilidades de nombres colorados sería mucho más recomendable y fácil montar un puro sangre colorado que un liberal convertido.

Al otro lado la prueba de los nueve del que hablo: Mario Abdo Benítez puede ser joven pero reencarna todo lo que un día el país se propuso a olvidar (03/02/1989). O sea, no hay salida, están jodidos con cualquiera de ellos. Santiago Peña representa el desenchufe del coloradismo del protagonismo nacional. Si gana las internas ganará las generales. si gana Marito volvemos hacia atrás casi tres décadas. En cualquiera de los casos propongo la refundación del partido colorado y la actualización ideológica. Ser un partido centenario ya no es negocio. Más vale un partido honesto y moderno. 

Hace mucho tiempo que la ANR está totalmente corrompida. “LA NUCLEACIÓN DE HOMBRES LIBRES” estuvo codo a codo durante 35 años con la dictadura de Alfredo Stroessner formando el famoso trio (Partido Colorado, Gobierno dictatorial y las FF.AA.) Luego apoyó a Andrés Rodríguez, otro militar después del golpe. Wasmosy y Cubas son mucho más empresarios que colorados de base “añetete” Argaña el gran líder tradicionalista fue desechado y robado al mando de Lino Oviedo por la propia dirigencia interna que hoy se autodenomina defensor de los intereses del partido. Los tres párrafos del preámbulo de la ANR es una mentira de cabo a rabo. Nicanor fue el último caudillo “añetete” pero su actitud de impostor de BLANCA le costó la llanura al partido y a él el sobrenombre de “mariscal de la derrota” hoy está sin manija. Ora de un lado, ora de otro.

El partido declara en su preámbulo ser contrario a todo tipo de dictadura individual o de grupos y presuntamente asegura al pueblo la participación creciente en la riqueza. Habla de una sociedad igualitaria sin privilegios ni clase explotada. Casi un partido comunista. Pero supongamos socialista. Pero ni uno ni otro. El Paraguay es comandado por un individuo desconfiado, arrogante  y autoritario que tiene su grupo de intereses particulares estratégicos y complejos y la participación del pueblo en la riqueza es una blasfemia.   Es uno de los países más desiguales del mundo donde la riqueza está concentrada en manos de una centena de familias. Se parece más aun Estado cleptocrático que democrático.

Santiago Peña hasta ahora no ha conseguido conquistar ni a los empleados de su ministerio. Los funcionarios de hacienda no le quieren ver ni en caja de fósforos. Les quitó algunos beneficios salariales conseguidos por exhaustas negociaciones legítimas que actualizaban sus beneficios.  

Tampoco le quieren mucho los de diputados y senadores. Varios empleados de casi todos los ministerios y autarquías también le condenan. Muchos de ellos gritan por el fin de algunos privilegios inconcebibles como es el caso de los de Itaipú binacional (que se trasladaban de CDE a Asunción y viceversa para hacer la misma cosa y así ganar beneficios de planilleros)  no obstante otros como los de hacienda eran merecedores de sus haberes por sus labores burocráticos y de interés público vital (hay que separar la paja del trigo). La ciudadanía puede ver estos cortes con buenos ojos para las generales, pero también puede ser un problema para las internas.

Me decía una fuente muy cercana y fidedigna de la presidencia de diputados que cuando Peña visitaba al presidente Hugo Velázquez en su despacho era normal que el ministro no le saludara a nadie ni siquiera le dirigía la vista a ninguno, mucho menos la palabra. Prepotente la tipo. El voto exige humildad. De lo contrario exigirá mucha plata. ¿La base colorada acepta venderse o ser conquistada?

La única parte del preámbulo de la ANR que se puede ponderar es lo que se refiere a los factores externos como solidaridad internacional y esfuerzos por la paz. Párrafo solitario y filosófico porque en realidad nuestra participación en el palco global es ínfima e imperceptible. Vendemos más cigarrillos de contrabando que causan enormes perjuicios  a la salud humana mundial y a las arcas de los Estados vecinos que cualquier beneficio concreto y real. O sea, ni eso al final.

¿Qué se espera de la política? Que haya un programa que pueda resolver los graves problemas de la nación: pobreza, falta de educación y falta horizonte para todos. Los jóvenes son mayoría en el Paraguay y está en sus manos exigir de quien sea el candidato un plan nacional de políticas públicas seria para disminuir el desencanto, el desempleo, la inseguridad, la pobreza extrema y la falta de conocimiento que nos lleva a la cola de los países en términos de desarrollo económico y social. 

“La política no le hace ladrón a nadie. Son tus votos los que colocan al ladrón en la política” conclusión: lo obvio no se discute. Cuando la historia se repite, los países están condenados al fracaso.

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